ESPIRAL
ESPIRAL
Parc Urbá Can Carreres
Sant Boi del Llobregat
Relñieve en bronce
50x50 cm
El proyecto para el parque urbano de Can Carreras incluye un laberinto cuya estructura la componen formas espirales, en su recorrido se instalarán veinte losas con un relieve en bronce de 50x50 cm.
Para que las partes conformen un todo, mi propuesta para la intervención art al carrer consiste en una espiral formada por una frase en relieve, “asegura la permanencia del ser a través de las fluctuaciones del cambio”, la frase está compuesta por letras de dos tamaños, las letras más grandes miden 4 cm , las más pequeñas están en proporción áurea con la mayor, 1,53 cm aproximadamente. Las letras disminuyen su tamaño en el rectángulo áureo que forma la espiral dentro del cuadrado. Esta frase encierra la esencia del simbolismo de la espiral y el laberinto, puesto que hace referencia al crecimiento proporcional y armónico, en todos los sentidos, tanto físico como espiritual.
La curva de la espiral está construida en base a la proporción áurea, para que su crecimiento sea armónico.
Es el resultado de un estudio comparativo de los simbolismos del laberinto y la espiral, ya que están estrechamente vinculados y se complementan tal como podemos leer en los apartados siguientes.
charo gálvez
Parque Urbano Can Carreras, Sant Boi de Llobregat
LABERINTO
El laberinto es, originalmente, el palacio
cretense de Minos donde está encerrado el Minotauro y de donde Teseo no puede
salir sin la ayuda del hilo de Ariadna. La esencia del laberinto es circunscribir
en el espacio más pequeño posible el enredo más complejo de senderos que
dificulte la llegada del pasajero al centro que desea alcanzar. Su asociación
con la caverna muestra que el laberinto
debe permitir el acceso al centro por una especie de viaje iniciático, y
prohibirlo a quienes no están cualificados.
Para los
alquimistas, el laberinto, representa la imagen total de la Obra , con sus principales
dificultades: la de la vía que conviene seguir para alcanzar el centro, donde
se libra el combate de las dos naturalezas, y la del camino que el artista debe
seguir para poder salir. Esta interpretación se uniría a la de una cierta
doctrina ascético-mística: concentrarse en sí mismo a través de los mil caminos
de las sensaciones, emociones e ideas, suprimiendo todo obstáculo a la
intuición pura y volver a la luz sin dejarse coger en los vericuetos de los
caminos. La ida y venida en los laberintos sería el símbolo de la muerte y la
resurrección espirituales.

La
transformación del yo que se opera en el centro del laberinto se reafirma a
plena luz, una vez finalizado el viaje de retorno. Este pasaje de las tinieblas
a la luz, marca la victoria de lo espiritual sobre lo material y, al mismo
tiempo, de lo eterno sobre lo perecedero, la inteligencia sobre el instinto,
etc...
ESPIRAL
La espiral, cuya formación natural es
frecuente en el reino vegetal y animal, evoca la evolución de una fuerza, un
estado.
En todas las
culturas se encuentra esta figura cargada de significaciones simbólicas: “la
espiral es un motivo simple, se trata de una línea que se enrolla sobre si
misma con un ritmo creciente e indefinido”. La espiral es y simboliza,
emanación, extensión, desarrollo, continuidad cíclica pero en progreso, y
rotación creacional.
La espiral
plana está asociada al laberinto, evolución a partir del centro, o involución,
retorno al centro. La espiral doble simboliza simultáneamente los dos sentidos
de este movimiento, el nacimiento y la muerte, kalpa y pralaya, o la
muerte iniciática y su renacimiento en un ser transformado. Indica la acción en
sentido inverso de la misma fuerza al rededor de los dos polos, en las dos mitades
del huevo del mundo.
La doble
espiral es el trazado de la línea media del ying-yang,
que separa las dos mitades, negra y blanca de la figura. El ritmo alternativo
del movimiento queda así expresado en ella con más precisión, así como en el
antiguo carácter chen (trueno). El
ying-yang puede ser considerado como el rastro descriptivo, en el plano
horizontal, de la hélice evolutiva. Esta hélice de paso infinitesimal simboliza
el desarrollo y la continuidad de los estados de la existencia, o también de
los grados iniciáticos, como ocurre en el uso simbólico de la espiral en la
escalera de caracol.
La doble
espiral de enroscadura opuesta (en S) es un símbolo de los cambios lunares y
del trueno, mientras que la tormenta está a menudo asociada a los cambios de la
luna. Es pues una expresión gráfica del simbolismo de la fecundidad asociado al
complejo tormenta-trueno-relámpago, en este sentido puede representar el
trompo.
La espiral es
un símbolo de fecundidad, acuática y lunar; marcada sobre los ídolos femeninos
paleolíticos, homologa todos los centros de vida y fertilidad, vida porque
indica el movimiento en una cierta unidad de orden o por la permanencia del ser
bajo su movilidad. Aparece en todas las culturas. Es un motivo que se encuentra
a menudo grabado por los celtas sobre dólmenes y monumentos megalíticos.

Para numerosos
pueblos de África negra la espiral o helicoide simbolizan la dinámica de la
vida, el movimiento de las almas, en la creación y en la expansión del mundo.
Algunas tribus bantú del Kasai (Congo), dibujan una espiral o una helicoide
para indicar el movimiento de las almas, los espíritus y los genios, entre los
cuatro planos del universo. En la glíptica de estos pueblos, una gran espiral
flanqueada por dos más pequeñas representa al Dios supremo creando el sol y la
luna. Una espiral sola representa la serpiente pitón adujada y abigarrada,
imagen del Creador y del movimiento cíclico de la vida.

La espiral
simboliza también el viaje del alma después de la muerte, a lo largo de los
caminos por ella desconocidos, pero conduciéndola por sus rodeos ordenados
hacia el foco central del ser eterno.
PROPORCIÓN
ÁUREA
El simbolismo
de la concha espiriforme se ve reforzado por los estudios matemáticos que
encuentran en ella el signo del equilibrio en el desequilibrio, del orden del
ser en el seno del cambio. La espiral logarítmica, posee esta notable propiedad
de crecer de una manera terminal, sin modificar la forma de la figura total y
ser así permanente en su forma, a pesar del crecimiento asimétrico.

Las
especulaciones aritmológicas sobre el “número de oro”, cifra de la figura
logarítmica espiriforme, vienen a completar la meditación matemática de la
espiral: “la curva de la espiral áurea
expresa la ley del incremento orgánico, crecimiento que se produce de forma
gnomínica euclidiana, ya que el ser vivo crece asimétricamente, pero permanece
semejante a la figura inicial.”

Por todas
estas razones semánticas y por sus prolongaciones, semiológica y matemática, la
forma helicoidal del caparazón del caracol, o de la caracola, es un glifo
universal de la temporalidad, de: la
permanencia del ser a través de las fluctuaciones del cambio.
Textos extraídos del Diccionario de los Símbolos de Jean Chevaliar-Alain Gheerbrant
Dibujos: Charo Gálvez
Preciosa la espiral.
ResponderEliminar